FERTILIDAD

Etiquetado: Fértil, Infértil, Estéril

Terreno infértil con la etiqueta No válido

Determinar qué es saludable y qué es enfermo no es un tema baladí puesto que conlleva la construcción de la enfermedad y por lo tanto un diagnóstico y el acceso a tratamientos. En el caso de la esterilidad, mientras que la OMS habla de la incapacidad de concebir tras dos años de relaciones sexuales frecuentes, 2 ó 3 cada semana, sin protección anticonceptiva, en la definición de esterilidad de la Sociedad Española de Fertilidad y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia  llama la atención que reducen a un año el tiempo de búsqueda gestacional, e incluso lo limita a 6 meses por encima de 38 años. 

La dificultad de realizar estas definiciones se basa en que esterilidad, infertilidad y fertilidad se encuentran emplazadas generalmente en un gradiente y aunque hay casos en los que los diagnósticos de esterilidad son rotundos, por ejemplo en casos de ausencia total de espermatozoides o de útero, la mayoría de las personas que recurren a tratamientos de reproducción asistida se encuentran en algún punto intermedio en el gradiente de la fertilidad. 

Gradiente de fertilidad

No obstante, es importante entender que la posición en ese gradiente es cambiante. Uno de los factores que nos lleva de la parte verde a la roja del espectro es el paso del tiempo, con la edad, todas las mujeres nos volvemos estériles sin que ello signifique patología alguna. No obstante, conozco unos cuantos casos de mujeres que mediante cambios en el estilo de vida y alimentación pasaron de ser diagnosticadas de infértiles a los 35 a quedarse embarazadas de manera natural a los 41. Que os lo explique “Infértil y madre”

Y aunque los hábitos de vida y la alimentación son factores básicos en nuestra fertilidad, a veces el peso del diagnóstico, la etiqueta Infértil o Estéril puede hacer tanta mella en la salud emocional y sexual que la persona entra entonces sí en un punto de no retorno.

La abuela de un amigo tenía 23 años cuando tuvo su primer hijo y se quedó embarazada fácilmente tras casarse. Al poco tiempo del primero empezaron a buscar al segundo. El ansiado embarazo tardó 7 largos años en llegar, y con 34 años se embarazó de nuevo. Y a los 36, 38, 37 y 38. Son cinco hermanos.
¿Qué pasó en esos 7 años? Cambios fisiológicos o bioquímicos en sus cuerpos que ni los propios protagonistas ni ningún especialista supo explicar. Seguramente tampoco hoy en día se podría pero hubiesen sido diagnosticados de esterilidad de origen desconocido. Hoy en día siguen habiendo casos así.

Por eso, fertilidad, infertilidad y esterilidad no son diagnósticos absolutos, pueden ser etapas, procesos bidireccionales en ese gradiente.